Hay que tener en cuenta que, desde el ramo de las aseguradoras y sus evaluadores de producto o riesgos, son actuarios, no son científicos, necesitan basar sus números y calcular los precios en base a datos y números fiables, ya que generar un nuevo producto no solo es asumir un riesgo, además crea un gasto para las aseguradoras administrativo y de producto, que difícilmente van a asumir, salvo que sean muy claros y reales. Por eso es importante hacer un trabajo minucioso y bien justificado, que permita superar cualquier examen o prueba, algo que, por parte de nuestra aseguradora principal, están tremendamente agradecidos por nuestro trabajo, nuestra profesionalidad y nuestra metodología, agradecimiento que es recíproco por nuestra parte y la de nuestros asegurados.